domingo, 14 de agosto de 2011

El dilema de FOB

Luis Armando Mendoza Leciano

Cumplido ya el ritual de su Segundo Informe, el gobernador Fernando Ortega Bernés entró ya en el camino de la definición de las candidaturas a las alcaldías, diputaciones locales y federales y senadurías.
Sin duda, definir las candidaturas a las alcaldías y diputaciones locales, que es lo que le corresponderá porque las diputaciones federales y senadurías serán definidas por el CEN del PRI y quien resulte candidato a la Presidencia de la República, es seguramente la principal preocupación del mandatario estatal.
Como lo marcan los tiempos del Código Estatal de Instituciones y Procedimientos Electorales el proceso electoral del 2012 arranca el próximo mes de septiembre y los partidos disponen de apenas seis meses para elegir sus candidatos a esos cargos, que contarán con plazo muy corto de campaña.
Así que el gobernador Ortega Bernés, a quien eufemísticamente se le denomina “el fiel de la balanza”, tiene que mover sus barajas para colocar como candidatos a quienes, en caso de ganar la elección, lo acompañarán en el segundo tramo de su administración.
Sin embargo, todo parece indicar que la definición de la candidatura para la alcaldía de esta capital se convertirá en un verdadero dilema para el mandatario estatal.
Para nadie son un secreto las filias del gobernador y que su intención es proyectar a Edgar Hernández Hernández, actual presidente del PRI Municipal y ex secretario de Administración e Innovación Gubernamental, pero la disyuntiva está en la posibilidad de que su partido no pueda recuperar la Presidencia Municipal de Campeche.
En el camino de la definición, el mandatario priísta podría encontrarse en la necesidad de tener que “elegir” como candidato a la alcaldía de Campeche a alguien que sí garantice la recuperación de la que se denomina la “Joya de la Corona”.
El problema radica en que la situación podría obligarlo a modificar su estrategia electoral, ya que entre quienes podrían garantizar el triunfo están algunos que no gozan de toda su simpatía y otros para los que tiene otros planes.
Entre los primeros, los que no gozan de todas sus simpatías, está el actual senador Alejandro Moreno Cárdenas, quizá el que mejor garantía de triunfo representa.
Entre los otros, está el actual secretario de Desarrollo Social y Regional, Raúl Aarón Pozos Lanz, a quien muchos ven como candidato a una diputación federal, además de la diputada local Ana Martha Escalante Castillo, cuyo principal obstáculo son las aspiraciones de su hermano Gabriel Escalante Castillo, a un cargo de elección popular.
Así, el gobernador Ortega Bernés se enfrentará a un escenario similar al que vivió su antecesor, Jorge Carlos Hurtado Valdez, a la hora de definir la candidatura al Gobierno de Campeche.
Todo mundo sabe que Hurtado Valdez hubiese preferido que el candidato a la gubernatura fuera Carlos Felipe Ortega Rubio, pero ante el peligro de perder la elección decidió por el actual mandatario Fernando Ortega.
Así que para el gobernador definir la candidatura a la alcaldía de Campeche se ha convertido en un dilema entre sus filias y sus fobias. Ya se verá por cuál se decide.

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